El mall fue diseñado en un solo nivel, con un concepto de simpleza. Esto se vuelca tanto en sus circulaciones bidireccionales como en la imagen exterior, pura y austera.
Zona: América del sur
Las medidas y la ubicación del lote presentan características mixtas: el frente, de 40 metros, está sobre la principal avenida de acceso a Pinamar, una zona de gran desarrollo comercial; el lado, de 135 metros, se despliega sobre una calle lateral multifamiliar.
Luego de realizar otros emprendimientos conjuntos, el team BMA + Arquitectónica fue seleccionado como uno de los 14 equipos que presentaron propuestas para este importante desarrollo en la zona sur de la ciudad de Buenos Aires.
El planteo implicó un rediseño de la situación urbana. La experiencia comercial del buffer, novedoso en Colombia, está tratada como área pública urbana con negocios a la calle, fuentes, paseos; en cuanto lugar de encuentro cumple, al mismo tiempo, un rol cívico.
Soho Tower fue concebido como un edificio con espíritu informal, buscando realizar un juego de volúmenes que conforman la torre de veinte pisos, a medida que se llega a los últimos niveles.
La gran particularidad es que en la casa vive una sola persona. El planteo, por lo tanto, responde al fuerte rol social que la vivienda debe cumplir: es un lugar para usar con amigos y para recibir a los nietos.
El Mall está ubicado en el kilómetro 40 de la ruta a Pilar, nació con el objeto de crear un segundo centro comercial de envergadura en la zona norte.
En Recoleta, uno de los barrios más prestigiosos de la ciudad de Buenos Aires, se ubica el predio donde originalmente se emplazaba el complejo de Village Cines, hoy refuncionalizado en un mall que contiene 76 locales comerciales.
El conjunto se ordena desde un espacio central como gran lobby de unión de todos los usos, y también desde una plaza exterior que actúa como recepción para los visitantes.
A diferencia de los esquemas eclesiásticos tradicionales, el programa del sacerdote a cargo fue lograr un espacio donde la mayoría de los feligreses pudieran estar cerca del altar.
El lenguaje arquitectónico combina la flexibilidad de usos y un estilo contemporáneo, con las imágenes típicas de las construcciones tigrenses: la estrecha relación con el agua, colores madera, la calidez, la incorporación armónica del paisaje
En una zona signada por malls ciegos, se buscó dotar al nuevo complejo de una identidad propia, acorde con el entorno, con Pilar, y con el estilo de vida de la gente que elige habitar cerca de la naturaleza.